3ª semana, parte 3

Me despierto, y escucho música. Alvin debe de estar con el móvil. Miro la hora: ¡¡¡6:55!!! ¡El bus me pasa a y siete! Decido quedarme a dormir un poco más y no ir a primera. Es lo que todo alumno sueco haría, y si estamos de intercambio, hay que seguir las normas suecas buenas y las malas. O mejor... venga, que me da tiempo. Me cambio rápidamente, me lavo la cara y me peino algo, me como unas galletas y me cojo un plátano para el camino. Meto todas las cosas que tengo tiradas por casa de Cortana en mi mochila, me despido de Alvin y salgo por la puerta. Llego de sobra a coger el autobús.

Pero la suerte definitivamente no está de mi parte, porque en el bús dirección Estocolmo, cogemos una retención flipante, y llego 25 min tarde a clase. Cuando llego a matemáticas nadie está haciendo nada, ya debió de acabar la clase y ahora Tapio (nuestro profesor de matemáticas y física) les ha dado tiempo para hacer los deberes que acaba de mandar. Así que me pongo a hablar con Luis y con Laura.

A las diez había un tumulto de gente concentrada en la puerta del teatro, hoy había una "charla", y decidimos ir a ver como era. Lo único bonito fueron las dos actuaciones musicales. La primera fue un coro precioso, pero la segunda... ay la segunda... Era una chica rubita que cantaba "I was here" de Beyoncé, y tenía una voz increíble. A mi me emocionó, porque nunca vi una actuación así en directo y fue precioso.

Luis

El sulfato cúprico hidratado

Después estuvimos en la biblioteca Luis, Laura y yo hasta que llegó Amaia, y fuimos a comer. La comida eran patatas cocidas con merluza empanada. No estaba delicioso. A las 12:10 fuimos a química. donde hicimos un experimento de CuSO4, Había que calentar en Sulfato cúprico para ver cuantas moléculas de agua había por cada mol de la sal. Laura y yo hicimos el experimento con Amanda, la única chica de clase. Nos sorprendió que fue muy maja con nosotros, porque era la primera vez que había hablado con nosotros. Esta clase fue genial, porque como todo el

Laura

mundo paseaba por toda la clase, nos relacionamos mucho con los alumnos.

Y por último física, Laura y Luis estaban en biología en esta hora, así que yo estaba solo. Pero el estar solo en clase hace que los alumnos se acerquen más a ti, así que estuvo bien, porque me preguntaron bastantes cosas, y no me aburrí en clase.

Y como de costumbre, al McDonalds (todos menos Amaia, que ya se había ido). Cuando salimos del McDonalds, Laura y Clara se fueron al gimnasio y Luis se fue a casa. Yo me fui a la biblioteca del instituto a mirar algunas cosas y a buscar información a cerca del trabajo de Green Cities que tenemos que hacer. A las cinco menos cuarto había quedado Clara con una profesora para ir a una excursión a Estocolmo, pero la profesora no apareció. Como teníamos pensado llegar a las ocho a casa, y eso era lo que les habíamos dicho a nuestros padres, nos pareció adecuado ir a Hammarby Sjöstad, el barrio ecológico de Estocolmo.

Llegamos tras dos trenes y dos metros, y habría merecido la pena que el viaje nos hubiera llevado dos horas, porque nos quedamos impresionados con el barrio. No voy a decir nada más, porque ya visitaremos el barrio con más calma más adelante, pero fue lo más bonito que llevamos visto desde el 8 de enero.

Y esto ha sido todo mi martes :D

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Ay, me he levantado demasiado pronto. Menos mal que hoy entro a las 10.

 ¿SABEÍS QUE DÍA ES HOY? 28 DE ENERO. Eso significa que ya llevamos veinte días de viaje, ¡¡osea un tercio!!

Y para nosotros no ha pasado ni una semana, que horror. A las diez estoy en tecnología, y la clase se pasa jugando a videojuegos, ¡hasta Viktor, un compañero de clase me enseñó un poco de programación en Java! La comida era tan desastrosa que nos fuimos a comer a Täby Centrum. Matemáticas no fue nada especial, y en italiano aprendimos a usar los adjetivos y frases básicas.

Cuando acabamos las clases, Clara, Laura y yo nos fuimos Täby Centrum, a tomar algo al Dunkin Donuts y mientras las chicas fueron media hora al gimnasio yo hice un par de recados. Después cogimos el bus, y cada uno se fue por su camino. Hoy solo estaban Astrid y el hermano en casa, así que no hicimos gran cosa.

Eso si, ¡me fui a dormir a las 9! Me dolía mucho la espalda, por lo que según me quedé tumbado me quedé tumbado durante 10 horas.